La incontinencia de orina es el escape involuntario de orina y afecta a 1 de cada 3 mujeres, produciendo alteración en la calidad de vida de las afectadas, limitándolas tanto en la realización de actividad física o en sus relaciones sociales y en casos severos, en sus actividades diarias.
Existen distintos tipos de incontinencia, las más frecuentes son:
Existen múltiples factores de riesgo para presentar incontinencia urinaria, por ejemplo, la edad. Tanto la prevalencia como la severidad de la incontinencia de orina aumentan con la edad. Las mujeres con obesidad tienen 3 veces más riesgo de desarrollar incontinencia de orina que las mujeres de peso normal.
La paridad, tanto el embarazo como el parto son factores de riesgo para el desarrollo de incontinencia de orina, a mayor número de partos, mayor riesgo. A mayor peso fetal igualmente el riesgo es mayor. La vía de parto también afecta, el parto por vía vaginal y los partos con fórceps tienen mayor riesgo de desarrollar incontinencia urinaria, siendo el fórceps el de mayor riesgo asociado, pero la cesárea no elimina el riesgo. Por otro lado, existen deportes de alto impacto que también van a producir un mayor riesgo de presentar incontinencia urinaria de esfuerzo, como el levantamiento de pesas.
La historia familiar, el antecedente de la madre con incontinencia de orina hace más probable que su hija la presente. Existen otros factores de riesgo como por ejemplo el tabaquismo, la tos crónica, el consumo de cafeína, el antecedente de accidente vascular encefálico, el presentar incontinencia anal, el síndrome genitourinario de la menopausia, el antecedente de una cirugía genitourinaria, radiación pélvica, entre otros.
En el manejo de las pacientes con incontinencia es importante considerar la modificación de factores de riesgo, esto no sólo en pacientes que ya presentan incontinencia, sino que, en la población general, por ejemplo, manejar la constipación crónica, que es otro problema frecuente en la población femenina o apoyar en el manejo nutricional a las pacientes con sobrepeso/obesidad. En las pacientes con incontinencia de orina de urgencia se recomienda además evitar el uso de irritantes vesicales como son el café, té, mate y bebidas gaseosas.
Un pilar fundamental en el manejo de las pacientes con incontinencia urinaria es la kinesioterapia pélvica, la cual debe ser realizada por personal capacitado, como son las y los kinesiólogos especialistas en piso pélvico. Las terapias realizadas por estos profesionales son la primera línea de tratamiento. Así mismo cumplen un importante rol en la prevención de incontinencia urinaria mediante la rehabilitación del piso pélvico en las pacientes que han tenido embarazos recientes, independiente de la vía del parto.
En Clínica Alemana de Temuco contamos con una Unidad de Piso Pélvico y Uroginecología multidisciplinaria que incluye ginecólogos y uroginecólogos, apoyada por urólogos, kinesiólogas de piso pélvico, coloproctólogos y psicólogas que abordan tanto la Incontinencia Urinaria como las otras patologías o enfermedades que afectan el piso pélvico. Formada el año 2008, está integrada actualmente, entre otros, por los siguientes profesionales abocados al diagnóstico y tratamiento de la Incontinencia Urinaria:
Ginecología:
Dra. Natalia Castagnoli, ginecóloga, subespecialista en uroginecólogía.
Dra. Paola Pino, ginecóloga.
Dra. Angela Schnettler, ginecóloga.
Urología:
Dr. Pedro Pastor, urólogo
Dr. Marcelo Torrejón, urólogo, quien realiza actualmente el estudio urodinámico multicanal, utilizado en los casos más complejos de incontinencia urinaria y en otras patologías.
Kinesiología de Piso Pélvico:
Klga. Gabriela Moraga
Klga. Camila Cárdenas
Si bien la incontinencia urinaria es una enfermedad frecuente, NO es normal ni forma parte del hecho de ser mujer y lo más importante es que tiene solución. Se debe buscar ayuda precozmente en profesionales capacitados (ginecólogos, urólogos, uroginecólogos, kinesiólogos especialistas en piso pélvico). La solución no va a estar dada por el uso de un apósito o toalla antiincontinencia, si no en la adecuada rehabilitación o manejo tanto médico como quirúrgico en los casos que corresponda. Lo que buscamos, a través de las distintas medidas terapéuticas, es mejorar la calidad de vida de nuestras pacientes.